viernes, 11 de enero de 2008

Entrevista: Presen Berbegal



Entrevista realizada a Presen Berbegal, participante del Aula de Medios de Comunicación en la UP (Universidad Popular de Valencia, Benimaclet). Las preguntas han sido realizadas por sus propios compañer@s del taller de medios.

La noche productiva

Si Presen posee una denominación de origen, esa es Foios. Allí vive, se asocia con otras mujeres, es madre, esposa... y allí también pasa las noches casi en vela. Esto que para la mayoría sería un inconveniente, para ella es su recarga de baterías, el momento de poner nombre a sus necesidades, su fuente de inspiración. Mujer comprometida y de inagotable curiosidad, vivió como los pintores o escritores varías etapas en su vida, pero sin lugar a dudas, se queda con la mujer que es ahora, la que ha logrado construir con sus luces y también sombras.

Citas que en tu vida se han producido dos etapas importantes ¿qué produjo el cambio para pasar de una a otra?
Yo creo que había acumulado una especie de materia gris de siempre, pero ya sabes la atención al marido, a los hijos, es prioritaria. Coincide con una cambio también del país en el que vives y esa acumulación de materia que te digo, la que te hace plantearte cosas. Y al buscarlas, las encuentras.

¿Fué entonces el entorno el que te hizo cambiar?
En el momento en el que los hijos se separan tienes más tiempo para replantearle las cosas y sobre todo con las que no estaba a gusto. Yo digo que utilicé la almohada. Duermo muy poco y de noche es cuando reflexiono, como los frailes en silencio, es cuando te vienen las cosas. No me sentía útil y buscaba ponerle un nombre a esa inquietud.
Me casé teniendo una zapatería, un negocio que funcionaba bien a la que dediqué 24 años de mi vida, tengo un buen recuerdo de la experiencia. Te acomodas en un estado que no es malo; pero no me llenaba.

¿Y qué pasó?
Un día paseando mi marido dijo algo que me hizo pensar. Que por qué no cerraba la tienda y me planteaba más seriamente la colaboración con una asociación de mujeres con la que yo tenía cierta relación. La idea se materializó en la cooperativa de Dones de l´Horta Nord, una casa de acogida para mujeres.

Y ahí empieza tu segunda etapa...
Os cuento una anécdota. En casa siempre hemos tenido coche. Pero recuerdo de manera especial el día que me compré un Twingo. Fue como si me viera a mi misma a través de un espejo, como si fuera otra persona. Allí estaba yo decidiendo por mi misma.

Me llama la atención una cosa que nos contaste hace tiempo, que no te gustaba coser.
Sí. A mi madre le daba cosa entregarme a mi marido sin esa habilidad. Y para mi era un trauma coger la aguja. Sudaba sólo de verla. Es muy fuerte como los padres te pueden llegar a influir. Ya casada, cuando tenía que hacer una pequeña labor, lo iba relegando hasta que el montón de prendas subía y subía. Vamos, prefería antes que coser ponerme a pintar una pared.
Un día le dije a mi marido que no iba a coser más. Es curioso como un detalle así te puede tener atenazada. Reivindiqué el hecho de que no me gustaba coser y con ello me reivindiqué a mi misma.

¿Y a tu marido que le ha parecido tu evolución, cómo lo ha vivido?
Él por su camino, yo por el mío, hemos llegado al mismo puerto. Pero en cualquier caso, si no hubiera estado de acuerdo, sería su problema.

¿Por el hecho de ser mujer has tenido alguna problemática?
Cómo me gusta que me hagas esa pregunta (ríe). He tenido un hermano que ha estudiado y yo no, y eso era lo que más envidiaba.

¿Qué te hubiera gustado estudiar?
Sociología o filosofía.

¿Cómo fue el iniciar la asociación de mujeres justo en aquella época, en el inicio de la democracia?
Primero tuvimos que conquistar el espacio para poder reunirnos. Hubo muchas dificultades, pero posiblemente, sin esa presión no hubiéramos hecho lo que hicimos. ¡Piensa que dábamos charlas de sexualidad en el salón de plenos!

Acaba la entrevista y nos vamos a tomar un café, Presen nos cuenta que ahora cuando toma un café no le sabe igual que hace 40 años. Ella que mezcla aromas y texturas en su combinaciones cafeteras, sabe que uno de los ingredientes que ha cambiado su vida ha sido la consciencia de sentirse mujer y de reivindicar su derecho a hacer lo que le satisface.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola. A todos, soy Presen una alumna de los medios de comunicacion,aunque tambien aprobecho para ir a clases de teatro en la misma universidad de Benimaclet. Aprobechando estas pequeñas vacaciones e pensado en algo que en mas de una ocasion comente con algunas compañeras,hacer una especie de asociocion de alumnas/nos para tener voz y sentirnos con derechos dentro de la UPE. Estoy segura que aunque mayores, todavia tenemos muchas cosas que decir y hacer, podemos y devemos hacerlo para mejorar nuestro entorno, y lo que es mas importante a nosotras mismas.

Anónimo dijo...

He llegit l'entrevista mamà. Qué gran eres!.Em sent molt orgullosa de ma mare i de tot el que m'has ensenyat, amb eixa força per reivindicar i reivindicar-se i eixa convicció de que canviar el món és possible. Gràcies. Mua.