Muchas son las acusaciones que habitualmente recibe la profesión periodística sobre su doblegamiento al poder, su connivencia con el tirano, con el dictador de turno.
Contra aquellos que opinan que el Periodismo está en crisis, surge la voz de los que más que nunca encuentran sentido a esta profesión: siempre deberá haber alguien que ponga sentido sobre la avalancha de informaciones que nos vienen encima a diario, y siempre alguien en algún lugar deberá hacer esa pregunta incómoda, incorrecta que todos pensamos y que algunos no se atreven a plantear. ¿Cómo reconciliar ambas posturas?
Con el trabajo de excelentes profesionales que los hay. Ana Pastor preguntó y nada de lo que pensábamos que se podía preguntar a un dictador como el iraní Ahmadineyad se quedó en la libreta de la periodista. Otra cosa fueron las repuestas instaladas en un bucle infinito de falta de razón y un sólo argumento con el que "defender" la opresión a un pueblo. La guinda, la anécdota: la caída de un velo en la cabeza de una mujer libre como metáfora de lo que desearían muchas otras que no lo son. Un gesto para la historia de la entrevista.
Podéis verla aquí.
martes, 22 de marzo de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Se nota la profesionalidad de Ana Pastor, seguida por la participe de taller ó sea Eva.
Con mi admiración,
Salvador
Gracias Salvador, por participar y comentar.
la profe
Sabes que no se merecen, solo que valoro el trabajo de mi profe.
Anim y endavant.
Tu alumno
Publicar un comentario